Si trabajas como root, un simple error puede dañar o incluso arruinar tu sistema. Por tanto te recomendamos que construyas los paquetes en este capítulo como un usuario sin privilegios. Por supuesto, puedes usar tu propio nombre de usuario, pero para asegurar un entorno de trabajo limpio crearemos un nuevo usuario llamado lfs y lo utilizaremos durante el proceso de instalación. Como root, ejecuta el siguiente comando para añadir el nuevo usuario:
useradd -s /bin/bash -m -k /dev/null lfs
El significado de las opciones:
-s /bin/bash: Esto hace de bash el intérprete de comandos por defecto para el usuario lfs.
-m: Esto crea el directorio personal para lfs.
-k /dev/null: Este parámetro evita que se copien ficheros procedentes de un posuble esqueleto de directorio (por defecto es /etc/skel), cambiando la localización de entrada al dispositivo especial nulo.
Si quieres poder entrar como lfs asignale una contraseña al nuevo usuario:
passwd lfs
y concede al nuevo usuario lfs acceso completo a $LFS/tools dándole la propiedad del directorio:
chown lfs $LFS/tools
Si creaste un directorio de trabajo como te sugerimos, haz que el usuario lfs sea también el propietario de este directorio:
chown lfs $LFS/sources
A continuación, entra como usuario lfs. Esto se puede hacer mediante una consola virtual, con un administrador de sesión gráfico o con el siguiente comando de sustitución de usuario:
su - lfs
El “-” le indica a su que inicie un intérprete de comandos de ingreso.